Arde un contenedor de basura en Huévar

Actuación de los bomberos - Foto bejaroldan

Actuación de los bomberos – Foto bejaroldan

Dos contenedores en la misma calle y en días diferentes se queman  por despiste o vandalismo.

La calle el Tamboril han vivido una agitada tarde. Efectivos del Cuerpo de Bomberos de Pilas han sofocado durante la tarde de este lunes un incendio en la calle el Tamboril de HuévarSegún fuentes de Bomberos, todo hace pensar que el fuego ha sido intencionado al ser un contenedor de recogida de cartones.

El primero de los incendios tuvo lugar el pasado sábado tenido lugar a las 15.00 en la misma calle el Tamboril y que fue sofocado rápidamente por vecinos y no causo daños al contenedor de residuos. El fuego de hoy en esta misma calle pero en uno de los contenedores de para la recogida de papel o cartones situado al termino de la vía urbana ha calcinado totalmente el contenedor a pesar de la pronta actuación de los bomberos.

– La mala practica de arrojar cenizas a los contenedores.

«La mala práctica de algunos ciudadanos que arrojan al contenedor los restos de cenizas, carbones y ascuas de las chimeneas o braseros puede ocasionar un incendio en el contenedor con el consiguiente daño en el mobiliario urbano y gasto para las arcas municipales, pero también en los camiones de recogida de residuos». Las brasas pueden tener fuego latente durante horas, y los bomberos aconsejan que pasen ese tiempo en un cubo-recipiente metálico antes de tirarlas al contenedor, «siempre en bolsas cerradas y después de haberles echado agua para estar completamente seguros de que no pueden prender».

Chimenea - Foto bejaroldan

Chimenea – Foto bejaroldan

Nada mejor como una chimenea o un brasero de picón o leña para hacer más llevaderos los meses más fríos, dos fuentes de calor muy comunes en casas de pueblo. Sin embargo, la mala gestión de sus brasas y cenizas como residuo está generando un alto coste para Ayuntamientos o Consorcios de Residuos.

La razón, es que las personas echan las brasas o las cenizas en los contenedores sin cerciorarse de que han sido apagadas. El coste de cada recipiente es elevado, aunque más allá de este despilfarro por negligencia, esta el peligro de que pueda salir ardiendo algún vehículo o parcela cercana y el daño sea mucho mayor.

En bolsa cerrada

La recomendación es de usar estas cenizas como abono orgánico, pero si no se elige esta opción, se recomienda apagar bien las cenizas con agua, y una vez se compruebe que están totalmente apagadas, se depositen en una bolsa de plástico bien cerrada y ésta se lleve hasta el contenedor de residuos orgánicos.

Las brasas y cenizas mal apagadas no son el único quebradero de cabeza para los Entes Públicos o Consorcios de Residuos, ya que también se detectan en algunos casos actos de vandalismo por personas irresponsables que no saben las consecuencias que pueden tomar un incendio, y más si existen coches aparcados.