El cambio de hora se producirá este domingo 26 de octubre

En-el-cambio-de-horario-de-inv_54353891788_51351706917_600_226Con motivo del cambio al horario de invierno, la madrugada del sábado 25 al domingo 26 de octubre, los relojes tendrán que atrasar una hora y a las tres serán las dos.

El cambio horario empezó a implantarse de forma desigual a partir de 1974, coincidiendo con la crisis del petróleo, para ahorrar energía y se justifica por sus impactos positivos no sólo sobre el ahorro sino sobre otros sectores como el transporte, las comunicaciones, la seguridad vial, las condiciones de trabajo y los modos de vida, la salud, el turismo o el ocio.

La madrugada del próximo domingo los relojes deberán retrasarse una hora (a las 3:00 volverán a ser las 2:00), con lo que finalizará el horario de verano, que ha supuesto en los hogares de españoles un ahorro potencial.

Durante los siete meses en que está vigente el horario de verano, desde finales de marzo hasta finales de octubre, se aprovecha más la luz natural, lo que supone un ahorro potencial de unos seis euros por hogar, según estimaciones del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía). 

El consumo eléctrico medio de una familia es de aproximadamente 3.800 kilovatios/hora al año, de los cuales el 14% corresponden a iluminación, lo que supone unos 532 kilovatios/hora anuales. 

El IDAE matiza no obstante que, para alcanzar ese potencial de ahorro, es necesario un comportamiento responsable en el hogar a la hora de prescindir de la iluminación artificial cuando no es necesaria. 

El horario de verano, que comenzó el pasado 30 de marzo, fecha en la que los relojes se adelantaron una hora, se adopta todos los años en cumplimiento de una directiva comunitaria y se calcula que supone un ahorro en iluminación de un 5%, unos 300 millones de euros en España según el IDAE, de los que 90 millones corresponden a los hogares. 

El cambio de hora se encuentra regulado en España por el Real Decreto 236/2002 de 1 de marzo, que incorpora la directiva europea. 

Ya en 1974, España y la mayor parte de los países europeos, a consecuencia de la crisis del petróleo, se plantearon medidas para aprovechar más la luz solar como medida de ahorro energético y, a partir de 1980, el Consejo de Comunidades Europeas se encargó de fijar el momento del cambio y de armonizarlo en todos los países. 

Se trata de una medida de ahorro que tiene, sin embargo, sus detractores, que consideran que este cambio tiene efectos perjudiciales  sobre la salud humana y animal, ligados a la secreción de melatonina, una proteína que regula el sueño. Si embargo hay quienes dicen todo lo contrario y que no afectan a la salud.

Sin embargo, la CE presentó en 2007 un informe para revisar la repercusión del cambio horario en diferentes ámbitos, que revelóefectos positivos de la medida en áreas como la agricultura o la hostelería y ciertos ahorros energéticos. 

En España, ha destacado, con el nuevo Código Técnico de la Edificación, se ha hecho «una apuesta muy fuerte» por la energía solar térmica y para aprovecharla al máximo es necesario «acompañar» al sol adaptando el horario oficial. 

Las horas de sol siguen siendo las mismas, pero con el cambio de hora en verano sí se aprovecha antes la luz solar y la captación de energía y eso es «una eficiencia» que supone un ahorro, ha indicado.
 
Con el retraso de los relojes una hora el próximo domingo se vuelve al horario de invierno, en el que se pueden seguir algunas pautas sencillas para ahorrar energía en los hogares

Así, sobre todo en zonas frías, es recomendable subir las persianas cuanto antes y que «el sol entre en casa lo antes posible», porque «son horas de calefacción que nos vamos a ahorrar». 

«El poder disponer de sol a una hora más temprana nos va a ayudar a calentar la casa antes«, y que, además, es «fundamental» que la vivienda tenga un buen aislamiento, tanto de cristales como de muros exteriores, para que ese calor no se pierda. 

Ver también: Guía Practica de la Energía – Consumo Eficiente y Responsable