La alcaldesa de Huévar denuncia que han entrado en el Ayuntamiento forzando la puerta de entrada

María Eugenia Moreno Oropesa – Alcaldesa de Huévar del Aljarafe

La alcaldesa de Huévar denuncia que la puerta del Ayuntamiento ha sido forzada

• La puerta había sido forzada y estaba abierta a una hora que no debía
• En principio no parece que hayan robado nada

Los hechos ocurrieron hace siete días y según confirma la regidora no han echado en falta nada esta semana

La alcaldesa de Huévar del Aljarafe, María Eugenia Moreno (PP), ha denunciado ante la Guardia Civil que alguien ha entrado en el Ayuntamiento de la localidad, sin que aparentemente haya sustraído nada. La alcaldesa acudió a las dependencias de la Guardia Civil de Pilas para presentar una denuncia por la supuesta intrusión. En la denuncia, a la que ha tenido acceso este periódico, Moreno expone que los hechos ocurrieron la tarde del 20 de octubre.

Sobre las ocho y diez minutos de aquel día, un operario del Ayuntamiento observó al pasar por la puerta cómo ésta se encontraba abierta cuando debería estar cerrada. La puerta presentaba unos daños y podría haber sido forzada. Este trabajador llamó al teniente de alcalde, Jesús Ruiz, para avisar de lo ocurrido. Éste se encontraba en ese momento en Sevilla y no podía desplazarse en ese momento a Huévar, por lo que decidió llamar a la propia alcaldesa para comunicarle lo que había pasado.

La regidora había recibido también una llamada del jefe de la Policía Local de Huévar, que la informaba sobre el mismo asunto. Minutos más tarde, la alcaldesa y el jefe de la Policía Local acudieron al Consistorio para comprobar si había desaparecido algo. En principio no había sido sustraído nada, «ningún tipo de objetos ni materiales», ni tampoco se habían producido más daños que los de la puerta. La regidora deja abierta la posibilidad de que «haya sido sustraído algún tipo de documento o sellos que no hayan podido percibir hasta la fecha». La puerta fue restaurada con la ayuda de los familiares de la alcaldesa.

Esta supuesta intrusión se produce en mitad de la polémica generada en el Ayuntamiento de Huévar, donde el PP ha denunciado la presunta compra de votos por parte de los anteriores gobiernos socialistas. La Fiscalía de Sevilla está investigando esta denuncia por la «compra de votos y malversación continuada con dinero público».

La alcaldesa aseguró que se habían destruido una serie de documentos y que había una trituradora de papel trás la silla del alcalde, «inservible y casi quemada por el uso» El PP de Huévar sostiene que los anteriores gobernantes ofrecieron dádivas y recompensas mediante la contratación pública de vecinos o familiares, para la obtención de votos en las diferentes elecciones.

Huévar en el epicentro de la polémica

Este incidente pasaría desapercibido si no fuera porque la localidad del Aljarafe sevillano está en el epicentro de la polémica por la denuncia que ha hecho la regidora contra el anterior equipo de Gobierno municipal del PSOE por una presunta compra de votos de vecinos a cambio de trabajos eventuales en el Ayuntamiento. Una práctica que podría constituir un delito electoral.

El pasado 18 de octubre, los populares presentaban una denuncia en la Fiscalía de Sevilla por unos hechos que consideran no sólo indiciariamente un delito electoral sino también otro de malversación de caudales públicos. Este segundo se basaría en las facturas que encontraron sobre pagos de mítines del PSOE con dinero de los presupuestos municipales.

Toda la documentación que sirve de base para la denuncia que ya obra en poder del Ministerio Público, que ha abierto diligencias, fue rescatada de la trituradora por Moreno. Como relatara en exclusiva ABC, el PP se hacía con el Ayuntamiento de Huévar tras una larga hegemonía socialista. Moreno consiguió el bastón de mando por sorpresa después de que Adelante Huévar se abstuviera en la votación. La popular, que había sido la más votada en las elecciones, dio la orden de cambiar las cerraduras del Ayuntamiento el mismo día que tomó posesión del cargo. Eso permitió que muchas cajas que aún permanecían en los despachos fueran recuperadas y los documentos que guardaban no fueran destruidos como otros. Entre ellos estaban los papeles del Plan 1.000, donde se detallaba cómo conseguir los votos de los vecinos.